Reseña Never Never Colleen Hoover - Terryn Fisher (Never Never #2)

Titulo original: Never Never Part Two (#2 Trilogía)
Autor: Colleen Hoover, Terryn Fisher
Género: Juvenil, Romántico, Misterio
Editorial: Hoover Ink
Fecha de publicación: 17 Mayo de 2015

Reseña Never Never #1 aquí.

Sinopsis

"Nunca olvides que yo fui tu primer beso real. Nunca olvides que tú serás mi último. Y nunca dejes de amarme entre todos ellos. Nunca pares, Charlie. Nunca olvides.”

Silas lleva una carrera a contrarreloj al tiempo que desentraña más verdades, mientras que otras se enredan aún más. Y ahora, cuando Silas está perdiendo el control y los otros comienzan a señalar con el dedo, las apuestas son más altas. Charlie está en problemas y él es el indicado para unir el abismo entre su pasado y su presente. Porque en algún lugar entre los “te amo”, los “nunca, nunca” y los “nunca más”, una verdad imposible de imaginar, invita a ser descubierta.

“¿Dónde estás, Charlie?”

¡Hola! Os había dicho en mi anterior reseña, que os traería esta cuanto antes. Y aquí estoy ^^. Os advierto que si no os habéis leído el primer libro, la reseña puede contener un poco de spoilers.

Este segundo libro, os lo juro, me dejo peor que el primero. Si en el primero teníamos misterio puro y duro, en este encontraremos más de lo mismo. Nos logra aclarar algunas cuantas cosas, pero no nos define que es exactamente lo que le pasa a nuestros protagonistas.

Hasta ahora tenemos que pierden la memoria cada 48 horas. Al comienzo del libro Silas acaba de perder la memoria, descubre que no es la primera vez que pasa, y encima Charlie ha desaparecido.

Nadie sabe donde está, y Silas menos, ya que ha vuelto a empezar desde cero con su memoria en blanco, lo único que tiene son unos apuntes que escribieron entre él y Charlie, y a partir de allí tendrá que emprender en su búsqueda.

Este libro tiene 91 páginas, como veréis menos que el anterior, así que yo me lo leí el mismo día en el que me leí el primero. Empieza justamente donde terminó el primero y está narrado de igual forma desde el punto de vista de los dos protagonistas. Aunque en principio nos encontramos más capítulos narrados por Silas.

En el anterior descubrimos que las familias de ambos no se pueden ni ver, y lo de ellos vendría a ser un romance a lo Romeo y Julieta. En esta segunda parte conocemos un poco más sobre el padre de Charlie que está en la cárcel, y toman un poco más de relevancia personajes como Avril (con quién engañó Silas a Charlie), la vidente del primer libro y la que parece ser su hija (que además es compañera de instituto de Charlie y Silas).

Sobre Charlie, unos capítulos después del comienzo del libro, descubrimos que se encuentra en una especie de búnker (ubicado en un lugar que tiene mucho que ver con el titulo de los libros), donde es atendida por una supuesta enfermera (que al final descubrimos de quién se trata). Todo esto a mi realmente me sonó a conspiración, y aquí ya empecé a crear mis propias conclusiones, que no se si serán correctas.

El rollo de las familias, la verdad me hace sospechar mucho, no sabemos aún muy bien lo que ocultan, pero creo que la familia de Silas (o por lo menos su padre), podría estar implicada. Landon me sigue pareciendo el único sensato de esa familia, y como os decía en mi anterior reseña, le servirá de apoyo a su hermano.

Hay otra cosa que llamó mucho mi atención, y es que ahora tanto Charlie como Silas, consiguen tener recuerdos de ambos a través de los sueños, así que al final cuando se reencuentran no les parece que sean desconocidos.

Conocemos muchas partes de su pasado, y lo mucho que se querían antes de que empezara todo esto. En la mayor parte del libro aparecen cartas, bien dirigidas de Charlie a Silas, o viceversa. Realmente algunas son muy emotivas y bonitas, me enternecieron un montón (os dejaré el fragmento de alguna en las frases).

En este libro su relación, evoluciona, ya no nos encontramos a la Charlie fría con Silas, ahora confía un poco más en él y están dispuestos a luchar juntos por descubrir la verdad. La escena final demuestra que están muy bien compenetrados y se las pueden apañar con su perdida de memoria, siempre y cuando permanezcan juntos.

Este libro sigue el ritmo frenético del primero, consigue atraparte al instante y se lee rápidamente. Lo que me sigue dejando mal son esos finales tan abruptos, que te dejan con ganas de más. Y es que el final de este libro no es tan distinto al anterior, dejamos a una Charlie y a un Silas a punto de perder la memoria, sin respuesta alguna a lo que les pasa, aunque con algunas pistas, que me parece a mi que son importantes.

Puedo empezaros a contar mis deducciones, pero necesitaría que os leyerais el libro.

Sobre la tercera parte de Never Never, aún no se sabe nada, así que toca esperar para saber que descubren nuestros protagonistas. No estoy segura si se tratará de una trilogía o una saga, pero tomando en cuenta lo corto que son los libros y todo el misterio que hay detrás, empiezo a pensar que con tres libros no me bastará.

Citas favoritas

¿Quién soy yo?

Parece tan natural que tus pensamientos contengan la palabra yo. Pero cada uno de mis pensamientos son huecos, sin sentido, porque la palabra "yo" no se adjunta a nadie. No recuerdo mi nombre, ni mi rostro. Soy...nadie.

Por favor, no olvides, Charlie.

Nunca permitas que tu terquedad te haga pensar que nuestro beso estuvo mal.
Nunca olvides lo bien que se sintió cuando mis labios por fin tocaron los tuyos.
Nunca dejes de necesitar que te bese así de nuevo.
Nunca olvides la forma en que me acercaste a ti...queriendo sentir mi corazón latiendo dentro de tu pecho.
Nunca me impidas besarte en un futuro cuando una de tus risas me haga desear de nuevo ser una parte de ti.
Nunca me impidas abrazarte como finalmente te abracé anoche.
Nunca olvides que fui tu primer beso real. Nunca olvides que tu serás mi último.
Y nunca de amarme entre todos ellos.
Nunca pares, Charlie.
Nunca olvides.

Tal vez soñaré con esa noche si me duermo pensando en ello.

Cierro los ojos, sabiendo que esto es exactamente lo que se supone que debe ser.

Charlie y Silas.

Juntos.

No sé porque siempre empezamos distanciándonos, pero estoy seguro de una cosa: nunca permitiré que suceda de nuevo.